Todos tenemos nuestra postura favorita para dormir. Acurrucados, boca arriba, con los brazos extendidos… ¿Pero alguna vez has considerado que la forma en que duermes puede tener un gran impacto en tu bienestar? Es posible que dormir sobre el lado izquierdo sea más que solo cómodo: puede mejorar naturalmente la digestión, la respiración e incluso los dolores matutinos. ¿Curioso? Continúa leyendo.
Dormir sobre el lado izquierdo: Un verdadero respiro de aire fresco para tu cuerpo.
Menos ronquidos, más tranquilidad.
Los ronquidos no son solo un ruido molesto; también pueden afectar la calidad de tu sueño… y el de tu pareja. Cuando duermes boca arriba, tu lengua tiende a enrollarse y bloquear ligeramente tus vías respiratorias. El resultado son vibraciones (también conocidas como ronquidos), que impiden un sueño profundo. Girar sobre el lado izquierdo mantiene tus vías respiratorias abiertas, reduciendo naturalmente este fenómeno. Una solución simple para un sueño más reparador.
La mejor digestión… mientras duermes
¿Sabías que tu estómago se encuentra principalmente en tu lado izquierdo? Al acostarte de ese lado, simplemente ayudas a la gravedad a actuar. El resultado: una digestión más fluida, menos reflujo ácido, menos hinchazón... Es casi como si tu cuerpo se regulara día a día, sin ningún esfuerzo.
Alivio de espalda al despertar. Dormir
boca abajo puede causar torsiones y tensión en la columna. Dormir boca arriba depende del colchón. Pero sobre el lado izquierdo, el cuerpo encuentra una mejor alineación, especialmente si se coloca una almohada entre las rodillas. ¿El resultado? Menos dolores, mayor flexibilidad por la mañana y una espalda que te lo agradecerá al despertar.
¿O incluso… un aporte de energía para el cerebro?
